Viernes
A veces la vida es lo que hay entre el viernes y el lunes
Confluencia de Concha Espiña y Rodríguez Marín. 14:30 horas.
Paro un taxi. Conductor: 50 años, cadena de cristo, patillas, Ray Ban, camisa entreabierta voz rota.
Taxista: Amos jefe que cuanto antes llegue a casa antes me echa la bronca mi señora y me echo la siesta.
Un servidor: No se preocupe que vamos aquí al lado, a Nuevos Ministerio.
T: Cagoendios, esa zona no la soporto desde que el imbécil del orejas y su amiga la fascista nos cortaron la Castellana. En fin, que no me quiero enfadar. ¿Le cuento un chiste de mujeres?
US: Faltaría más.
T: Ahí vamos, jefe. ¿En qué se diferencian los hombres y las mujeres.
US: Tu dirás.
T: En que a los hombres nos dicen algo al oído y nos entra por un lado y nos sale por otro y en las mujeres les dices algo al oido y les sale por la boca. Jaaaaaaaaaaaaaaaa. Es que son unas cotorras me cago en la madre que las parió.
US: Hombre....
T: ¿Tú tienes mujer?
US: Novia.
T: Pues no te cases porque te vas a jartar a discutir. Es que es verte la cara y venga. Yo por eso me arreo un par de copitas antes de ir a casa porque si no cualquiera la aguanta...Bueno, pues aquí estamos.
US: Pues gracias, ¿me hace una factura?
T: Claro que sí. Pero acuérdate, no te cases ni de coña.
Se busca Director de Comunicación. Requisitos:
- Inculto.
- Ególatra.
- No sepa escribir.
- No controle ningún entorno informático.
- Desee secretaria.
- Tenga morro.
- Cuente con enchufes o apellido ilustre.
- Hable inglés.
Interesados, no desesperen que seguro que al final consiguen el puesto.
Esta semana me voy a poner a dieta de orgullo y egoismo. Me voy a dar a la comprensión, el apoyo y el diálogo.
"Los halagos debilitan, las críticas fortalecen". Es una frase que no sé quién dijo y que se me quedó grabada hace tiempo y, como todo, tiene mucha parte de verdad, pero también parte de mentira. La diferencia reside en los matices. En cómo te digan esas críticas o esos halagos. Una hostia duele, pero se pasa. Una mala frase no hace daño, pero te puede hundir.
Cada uno tenemos nuestras aptitudes y capacidades. Últimamente he visto que hay una que me llama la atención y que me parece superlativa: la capacidad de perdón.
A veces ocurre que cuando te ríes expulsas mucho aire en la nariz. En un día malo puedes tener la mala suerte de tener mocos y que salgan disparados. Si encima pasa en un grupo de gente y además son desconocidos la vergüenza puede ser de órdago.
Le han dado a Madrid la organización del Día Mundial del Orgullo Gay. Supongo que será porque Madrid es la ciudad donde el tráfico da más por el culo.
Hay mucha gente, entre la que me incluyo, que lleva una libreta consigo por si se le ocurre una idea (difícil), ve algo que le llama la atención (posible) o tiene que apuntar un teléfono o una dirección (normal). El caso es que he leído una anécdota de Einstein al respecto.
Estaba el padre del emecealcuadrado paseando por París con un poeta, Paul Eluard. El escritor le dijo que llevaba siempre una libreta para apuntar las muchas ideas que se le ocurrían. El caso es que quiso saber si Einstein también lo hacía. El premio nobel, que iba fumando pipa, la apartó de la boca y le dijo: "Yo no necesito apuntar mis ideas en ninguna libreta. Tengo tan pocas que cuando se me ocurre una sé que no se me olvidará jamás".